Por Arcadio González Ardila, reportero de El País.
27/04/2010
Gustavo Petro, candidato del Polo, dice que Juan Manuel Santos quiere ganar en primera vuelta, y que por eso ”busca destruir a Noemí”.
Las únicas encuestas que verdaderamente cuentan para Gustavo Petro Urrego, el candidato presidencial del Polo Democrático, son las que realiza su propio partido, para consumo interno.
Esas mediciones le indican que ha recuperado terreno, pues está en el 9% -en otras estuvo en 12%- pese a que en los demás sondeos su figuración apenas llega al 5%.
Petro confía en repuntar antes de la primera vuelta, pero descarta cualquier posibilidad de alianza, y menos si se trata de su adhesión a otro candidato. “Nunca verán a Petro arrodillado”, afirma.
¿Cómo pinta su campaña a cinco semanas de las elecciones?
Soy optimista. Las encuestas que tenemos sin manipulaciones indican que hemos recuperado espacio. Lo que sentimos en las calles es muy positivo: un gran furor a favor del candidato Gustavo Petro. Eso me lleva a pensar que tenemos opción.
¿Qué le dicen las encuestas internas del Polo?
Que estamos en 9% del electorado, llegué a estar en el 12%. Creo que estaremos en 1,4 millones, es un buen case. La estrategia de Juan Manuel Santos es ganar en primera vuelta, por eso intenta destruir a Noemí, mientras que Antanas Mockus se derechizó para quitarle votación a Santos. Mockus no está planteando un programa de equidad social, mucho menos Santos, así que nosotros podemos ser la opción.
En las encuestas usted marca entre 4% y 5% ¿Por qué una diferencia tan grande con las del Polo?
Es una clara manipulación matemática. Un encuestador jamás podría decir que es independiente la favorabilidad de un candidato a la intención de voto por ese candidato. Son interdependientes: la gente vota si primero tiene una visión favorable de esa persona, y si en la encuesta un candidato tiene cero por ciento de favorabilidad y cinco por ciento de intención de voto, pues hay trampa.
¿El Polo ha tenido suficientes garantías en esta campaña?
Las ‘chuzadas’ del DAS demuestran que al Polo Democrático lo quieren destruir. Ha sido una campaña sistemática con miles de millones de dineros públicos y con la más alta tecnología para destruir a la oposición de Uribe. La ‘Operación Amazonas’ busca el desprestigio personal de los dirigentes de oposición ligándonos con las Farc y con Chávez, y con amenazas masivas, chantajes. Es una actividad dictatorial contra la oposición. ¿Qué garantías podemos tener? Estamos luchando, resistiendo, contra una maquinaria estatal que quiere destruirnos.
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¿Es una situación propia de la coyuntura de estas elecciones?
No. Es que el desprestigio no se construye en un día, el desprestigio de los dirigentes de la oposición política viene construyéndose hace varios años.
¿Es decir, su trabajo político no ha tenido garantías?
No, y cualquiera que me venga a decir ahora lo contrario, pues con la investigación al DAS por el tema de las ‘chuzadas’, es porque vive en otro país. La verdad, nos quieren destruir.
¿Cómo ha visto las expresiones del presidente Uribe a favor y en contra de determinados candidatos?
Hace parte de todo esto. El Presidente tiene su candidato -Juan Manuel Santos- y como Mockus se derechizó, por eso lo ataca. Dejó de atacar al Polo porque en su propio patio se coló alguien que a él no le interesa: Mockus.
¿Qué opina de las afirmaciones del presidente Chávez de que Juan Manuel Santos es una amenaza para la región?
Pienso que Chávez confundió a Santos con Noemí. A mí me consta que Santos no quiso dar un mensaje violento ante la pregunta (en el último debate en televisión). La que respondió así fue Noemí y creo que cometió un gran error: hay que tener responsabilidad en temas tan delicados como decir que va a bombardear otro país. Eso, obviamente, produce reacción del otro lado porque nadie querrá que lo bombardeen. Pero sí se ve una interferencia desde afuera de la frontera.
¿Por qué dice que Mockus se derechizó? ¿Es una estrategia electoral?
El Secretario de Salud de Mockus es el actual Viceministro de Salud, y la Secretaria de Educación de Enrique Peñalosa es la actual Ministra de Educación, es decir son los ejes de los dos grandes ministerios sociales del presidente Uribe. En esa medida es un proyecto de derecha que convirtió los derechos sociales como la salud, la educación y el agua, en mercancías. Y en eso coinciden Uribe y Mockus.
Ahora, la diferencia entre Uribe y Mockus es el tema de la conducta antimafiosa, y en esto Uribe tiene problemas, por eso quiere poner un candidato que le ayude y ese es Santos.
¿Esa derechización de Mockus descarta desde ya una alianza Polo-Partido Verde para la segunda vuelta?
Una alianza se hace a partir de programas. Eso fue lo que yo le propuse al Partido Verde el año pasado, hacer un acuerdo programático para ver si teníamos puntos comunes. Pero ellos no quisieron, así que esa eventualidad no ha estado en el terreno de la política.
¿No hay posibilidad de alianzas antes de primera vuelta?
Si hay un acuerdo programático, puede haberlas. Implicaría antes de primera vuelta una adhesión de un candidato hacia mí, y lo veo poco probable.
¿Y una adhesión suya hacia otro candidato?
Noooo, nunca verán a Petro arrodillado, ni a palo.
¿La gestión del Alcalde de Bogotá ha afectado su campaña presidencial?
No, mi campaña es nacional. En Bogotá los pobres están con nosotros, los ricos no. Yo estoy reivindicando hechos construidos por el Polo en Bogotá: la política en educación, por ejemplo. Bogotá mejoró la calidad educativa en los gobiernos del Polo como nunca se había visto, pero cuando la ciudad fue gobernada por Mockus y Peñalosa retrocedió enormemente.
El modelo de medicina preventiva que propongo: hacer de la salud un derecho gratuito para los colombianos sin necesidad de carné, fue un modelo exitoso en Bogotá.
En seguridad, Bogotá es la ciudad más grande del país y con menos homicidios. Fue el tránsito de la Cultura Ciudadana de Mockus a la equidad Social del Polo. Medellín es un fracaso: se puede ver la política de seguridad democrática de Uribe aplicada por el vicepresidente de Mockus, Sergio Fajardo, con bombardeos dentro de la ciudad.
Viendo eso en perspectiva, la Alcaldía de Bogotá en vez de quitarme, me alienta.
Esta campaña ha girado en torno de la seguridad democrática. ¿Usted la continuaría?
El objetivo de una política de seguridad, llámese como se llame, es acabar la violencia, y mi política de seguridad me dice que si no se construye equidad social, se mantiene la violencia. Según la política de Uribe y Santos, no hay necesidad de implementar una agenda de equidad social cuando la realidad indica que se equivocaron.
¿De qué manera logrará que la gente se fije en sus programas sociales?
Eso depende de los medios de comunicación: si la prensa sigue girando alrededor de encuestas, pues obviamente disminuye la posibilidad de dar a conocer mis programas. El eje central de mi estrategia de campaña es un periódico (el periódico del Polo) donde está reflejado todo mi programa y que se está repartiendo por millones gratuitamente en toda Colombia y que me permite sin mucha ayuda de los medios televisivos y de los medios tradicionales lograr la comunicación que quiero con la población.