Hoy, hace cuarenta años, el 25 de abril de 1981, perdimos a Martha Gisela Restrepo Valencia (Teresa / Inés), a Carmenza Cardona Londoño (Norma / La Chiqui) y a trece compañeros más, en las selvas del Chocó. Fue, sin duda, una mañana de sol radiante, a eso de las once, en un camino cubierto de espesa vegetación; bosque primario, húmedo y tropical, poblado de arboles legendarios, Carrás, algarrobos, peinemonos, guayacánes, jigua; tapizado de musgos, helechos y una capa de humus donde habitan serpientes, gusanos y millones de hormigas voraces. Por ese camino avanzaba alerta la columna guerrillera, llevando a cuestas la fatiga de varios días de intensos combates, desgastados por dos meses de travesía del litoral a la montaña. Marchaban, sin saberlo, en dirección al lugar en donde el hel
Haciendo memoria y rindiendo homenaje a las mujeres y a los hombres que siguen siendo ejemplo para la historia.
Martha Gisela Restrepo Valencia (1961 - 1981)
Gisela Restrepo Valencia "Inés", militante del M-19 muere en abril de 1981 a los 19 años durante la campaña del Chocó.
Fueron varios días de intensos y heróicos combates, en condiciones de profunda desventaja y frente a una desproporcionada fuerza militar de miles de soldados movilizados contra un reducido grupo de guerrilleros que pocos días antes habían desembarcado en la costa pacífica colombiana.
Gisela nació en Cali el 14 de agosto de 1961, hizo sus estudios, secundarios en el colegio público Eustaquio Palacios en donde se destacó como líder estudiantil.
Deportista consagrada en su adolescencia, fue varias veces campeona regional y nacional de esgrima en su categoría. Hizo sus estudios profesionales en el SENA y trabajó en la fábrica de papel “Celanese”. Desde su tierna infancia manifestó una gran sensibilidad humana y social que creció con el tiempo y con el ejemplo familiar, convirtiéndose en una fuerza infinita, en una voluntad de transformar el mundo, en una entrega total que la condujo a dar su vida por un ideal noble.
Inicia su militancia en el M-19 a través de un trabajo popular de organización y de concientización en el barrio Siloé, que sería años después uno de los bastiones de la insurrección popular armada dirigida por el M-19 en la década de los 80.
Se vinculó a las redes urbanas del movimiento y participó en varias acciones de propaganda al mismo tiempo que proseguía clandestinamente el trabajo político de base en el barrio Siloé.
Unos meses después de la muerte de su compañero en un operativo urbano en Cali en 1980, Gisela participa en una escuela de formación de cuadros militares en Cuba de la cual salen dos grupos que entran a Colombia en el mes de marzo en 1981, uno por Nariño y el segundo desembarca en la ensenada de Tribugá, en el puerto de Nuqui, en el departamento del Choco.
Las condiciones y las circunstancias del funesto desenlace de esta expedición son confusas y llenas de interrogantes, cuyas respuestas quedaron sepultadas con los jóvenes combatientes que ofrendaron sus vidas. De la columna del Choco hicieron parte entre otros Elmer Marin y Carmenza Cardona Londoño, “La Chiqui”, negociadora durante la toma de la embajada de la Republica Dominicana en 1980.
Un sobreviviente de la columna afirma que un grupo de doce combatientes, entre ellos varias mujeres, habrían sido enterrados en una fosa común en la localidad de Piedra Honda en el departamento del Chocó.
Según el testimonio todos tendrían un tiro de gracia en la nuca. Gisela y Carmenza habrían sido reconocidas por el testigo en el grupo.
El ejército colombiano nunca entrego los cuerpos ni dio información sobre la ubicación de la fosa común.