EL BLOQUE DEMOCRATICO
Por José Yamel Riaño
26 de noviembre de 2011
Se trata del diseño de una política que supere la dispersión ideológica, social y política responsable de tantas frustraciones, para implementar “la política del amor” que no es otra cosa que la garantía de convivencia en paz, respeto a la lucha social y disfrute equitativo de nuestras riquezas.
Sabemos que no es fácil, que requiere del esfuerzo de muchos y de la voluntad política de pueblo con sus líderes, para desde el Estado construir políticas públicas capaces de superar el atraso, revivir la esperanza y alcanzar los propósitos colectivos, razón de ser de estas luchas. Es decir, se requiere ser gobierno ya, hacer de esa consigna el principal objetivo y construir, partiendo del acumulado histórico, la fuerza de multitudes organizadas democráticamente capaz de lograrlo. Es la tarea de hoy y ahora. Por eso es imperativo comenzarla ya.
Ya existen las bases; el conjunto de organizaciones político-sociales de la democracia, haciendo uso de sus experiencias, corrigiendo errores y haciendo suyos los buenos ejemplos propios, y de nuestros vecinos latinoamericanos, deben construir el Bloque Democrático, -o la estructura que se necesite- como el instrumento idóneo que permita asumir el reto de ser gobierno.
Ya probamos que si se puede, la victoria de los bogotanos con Progresistas a la cabeza nos ha devuelto la esperanza a todos los colombianos. No se trata de cualquier triunfo, es la capital de la República y el centro más importante de la economía, la cultura y la política del país. Pero además, los triunfos en Santa Marta, (Magdalena) capital de la corrupción administrativa, Magangue, principal foco de poder de las mafias empoderadas del Estado local, el del municipio de Mosquera, además de otros donde Progresistas nunca existió como fuerza política organizada y menos legalizada son meritorias. Apenas con cuatro meses de estar sonando como grupo significativo de ciudadanos, es prueba que si se puede. Que los pueblos con sus líderes auténticos se sobreponen a las adversidades y triunfan.
No se trata de repetir historiascomo las de ADM19, tampoco del reagrupamiento de fuerzas de izquierda, centro o derecha como el PDA. Hoy es necesario ser muy amplios, incluyentes y creativos en la propuesta y en el instrumento organizativo. Saber encontrar las prioridades para tolerar lo secundario y desechar lo inocuo o perjudicial, pero sobre todo, asimilar las enseñanzas de la juventud de Colombia y del mundo que envían señales de nuevos paradigmas y construcción de fuerzas capaces de conquistar el aplauso y el compromiso de muchos que antes fueron inimaginables.
Es un requerimiento de vida para la nación, Colombia no puede seguir siendo la capital mundial del narcotráfico y la desigualdad social. Necesita vivir y vivir bien. Como lo merecen los pueblos con grandes riquezas naturales y un inmenso capital acumulado, gracias al trabajo de los colombianos. No más hambre, dolor y lágrimas, basta ya de tantas y tantas injusticias, preparémonos para ser gobierno. Si el gobierno de Progresistas en Bogotá, -dice el Alcalde Gustavo Petro- cumple con las expectativas creadas y abre nuevos paradigmas que mejoren las condiciones de vida de los bogotanos, Colombia sabe que ha llegado la hora de la Democracia y que dependerá de nosotros como pueblo el aprovechar o no, la oportunidad de liberarnos y trazar nuestro propio destino.
Los Progresistas no quieren ser un partido más. Estamos listos para ser parte de ese bloque histórico llamado a gobernar junto a la mayoría del pueblo organizado. -dijo Petro- Que sea el tipo de organización que mas convenga, en lo posible libre de jefaturas, de reglamentaciones que se conviertan en camisas de fuerza, Con formas modernas de autocontrol. Que sea propositiva e incluyente. Para hablar de eso se esta organizando una reunión nacional antes de la toma de posesión de Petro. Allí estará el Progresismo de Cali y el Valle del Cauca con sus nodos -por construir- y de los cuales hablaremos en otro momento.