Virginia de Duplat fue siempre la generosa madre que con su ternura llenó los lugares y soledades que la triste historia del dolor impuesto en los tiempos de las caballerizas y la brutalidad, quiso acusar en el camino de la lucha del M 19.
Virginia de Duplat habitó entre nosotros para romper los tiempos y distancias que con la cárcel y la tortura colgaban los sueños, pretendiendo desgarrar las esperanzas.
Por la duras calles de los tiempos aquellos rondando de la mano y el abrazo maternal, con los chales blancos como mensaje de regazo, consuelo y exigencia, Virginia siempre adelante mostraba el camino de los afectos y el encargo de la solidaridad y la ternura con los ‘presos políticos’, inicialmente desde la Picota en Bogotá, que luego se extendió por los rincones de la geografía patria abrigando a quienes necesitaban y buscaban amores y abrazos maternales.
Ella hoy está con nosotros como queremos sentirla y adorarla.
Gracias ‘viejita hermosa’ por lo tanto que de ti guardamos.
Tus hijos del M 19.
Bogotá, agosto 2 de 2011
Hipólito
Velación: Cristo Rey calle 100 con 18 hoy martes 2 y miércoles 3